La puntualidad es un asunto que varía de «cinco minutos» según las personas… Solemos lanzar «llego en 5 min» cuando sabemos que es mentira y eso dice mucho de nosotros y de nuestra relación con el otro a quien se anuncia este «leve retraso».
«Estaré allí en 5 minutos», la mentira más común que nos gusta lanzar
Sabemos que nuestro retraso irá mucho más allá de los cinco minutos anunciados pero persistimos en cuantificarlo… Básicamente, nos convencemos de que no es muy grave y sobre todo a veces nos convencemos de nuestra propia mentira… Este comportamiento es molesto cuando estamos la persona que recibe el mensaje pero tan irrelevante cuando enviamos el pequeño SMS. Incluso si no hacemos la pregunta en general, ¿qué significa realmente este comportamiento? En cualquier caso, esta banalización de la falta de puntualidad es una lacra de la que no parece que podamos librarnos…
«Llego en 5 minutos», una mentira muy cariñosa
«Estaré allí en 5 minutos» es una forma de disculparse no con la persona que nos estará esperando, sino con nosotros mismos que llegamos tarde. El mensajito se envía y listo, la culpa se va volando al mismo tiempo… Eso sí, una vez advertido de este “pequeño” contratiempo, podemos dejarnos llevar y los cinco minutos cambian y ya no contamos más. … Cuanto más cómodos y confiados estemos con la persona que tenemos que encontrar, más se deja vivir nuestra conciencia, menos puntuales estamos.
Si llegas tarde y estás pensando en enviar este mensajito engañoso, no hay duda de que estás hablando con un amigo…
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