Kate Middleton nos lo ha demostrado con el tiempo: es una profesional en el reciclaje de ropa. Lo cual, además de ser un gesto verde en cierto modo, no deja de tener sentido para la duquesa de Cambridge. De hecho, si tiende a volver a usar los mismos vestidos, es porque tienen una especie de poder de «suerte». Recientemente el fenómeno se ha intensificado. La prueba por cinco.
Kate Middleton nos lo ha demostrado con el tiempo: es una profesional en el reciclaje de ropa. Lo cual, además de ser un gesto verde en cierto modo, no deja de tener sentido para la duquesa de Cambridge. De hecho, si tiende a volver a usar los mismos vestidos, es porque tienen una especie de poder de «suerte». Recientemente el fenómeno se ha intensificado. La prueba por cinco.
Este fin de semana, Kate Middleton hizo una aparición sorpresa en una cena privada de la Royal Foundation en Londres. En esta ocasión, la duquesa de Cambridge lució un vestido rojo, como se muestra en una instantánea en la cuenta de Instagram del cantante Tom Walker. Un vestido que da una impresión de deja vu y con razón: ya lo llevó durante una visita oficial a Canadá en 2016.
Entendemos totalmente esta elección, porque el rojo es una apuesta segura pero también da un lado femme fatale que tiene algo que dar seguro. ¡Sin olvidar el lado sesentero de esta creación que no deja de tener su pequeño efecto!
Tuve el honor absoluto de actuar y conocer al duque y la duquesa de Cambridge y al duque y la duquesa de Sussex para la cena anual @kensingtonroyal #RoyalFoundation anoche. Gracias al súper talentoso pájaro @thatsingingbird de @wearefulleffect por acompañarme en mi última canción.
A principios de noviembre pudimos presenciar otro reciclaje de ropa por parte de Kate Middleton. Mientras se dirigía a los Tusk Conservation Awards en Londres junto al príncipe William, la duquesa de Cambridge apostó por un vestido largo turquesa adornado con encaje. Un vestido azul Jenny Packham Primavera-Verano 2012 que ya había lucido en los albores de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
Un buen momento para Inglaterra, cuando One Direction aún era un grupo unido. Uno solo puede entender la nostalgia de la duquesa.
A principios de octubre, Kate Middleton fue vista con un vestido lila tan elegante como informal para acudir al County Hall de Londres para asistir a la primera cumbre ministerial mundial sobre salud mental. Un vestido que -te damos a mil- la esposa del príncipe Guillermo ya se había puesto antes. Una moneda Emilia Wickstead que ya había lucido en 2017 durante su viaje oficial a Alemania.
¿Cómo puedes culparla cuando sabes cuánto el color lila da inmediatamente una tez bonita? Sería una pena privarse de él.
Durante la boda del príncipe Harry y Meghan Markle, la duquesa de Cambridge no quiso eclipsar a su cuñada. Así había optado por un atuendo sobrio y, mejor, por un vestido que ya se había puesto. Efectivamente, para la ocasión Kate Middleton lució un abrigo de gala que ya se había puesto para el bautizo de su hija Charlotte. Un valor emocional que hace aún más emotivo el gesto de la esposa del príncipe Guillermo.
El 15 de noviembre de 2018, Kate Middleton lució un vestido turquesa plisado para acudir a la sede de la BBC para hablar de medidas de prevención contra el acoso en las redes sociales. Una moneda Emilia Wickstead, a la que ya habíamos visto en abril de 2014 y diciembre de 2015. Sin simbolismos en particular, por supuesto, ¡pero queremos decir que el lado retro de esta creación es una apuesta segura para dar en el blanco!