¡Mi libido disminuye a medida que avanza mi relación! Qué hacer ?

Lejos de ser un problema raro o alarmante, la disminución del deseo puede asustar cuando se asienta entre dos parejas. La disminución de la libido multifactorial puede provenir de causas externas o desarrollarse dentro de la relación. ¡Aquí están nuestros mejores consejos para ayudarte a reavivar la llama!

Una confusión entre el amor y el deseo

El principal problema con la libido baja es que tendemos a sobreinterpretarlo: «Si ya no lo quiero, ¿es una señal de que ya no lo amo?» o «Si ya no me quiere, ¿cómo puedo estar seguro de que todavía me quiere?». “Esta confusión entre el deseo y el amor debe ser reestablecida, porque es fuente de malas interpretaciones. Entonces, ten presente que una disminución del deseo no necesariamente oculta los problemas dentro de tu pareja.

Deja el rendimiento sexual

Las fluctuaciones en la libido son completamente normales y deben entenderse como parte integral de la vida y de una pareja. Si, en el imaginario colectivo, dos amantes practican sexo todos los días… ¡la realidad es muy diferente! Según una encuesta de Ifop, los franceses hacen el amor en promedio una vez por semana. Por lo tanto, es fundamental dar un paso atrás en esta sociedad hipersexualizada que carga con falsas representaciones. No, no todas las mujeres sienten un deseo incontenible de hacer el amor todos los días. Y no, no todos los hombres pueden tener sexo durante dos horas cada noche. No somos máquinas de alto rendimiento que siempre tienen el tiempo, las ganas y la motivación. Lo más importante es que tú y tu pareja disfruten del sexo porque lo hacen cuando realmente lo desean, no porque tengan que hacerlo. Desde este punto de vista, la disminución de la libido suele ser menos dramática de lo que parece y los cambios en el deseo son inevitables.

Haz un balance de tu relación romántica

Sin embargo, a veces sucede que la caída de la libido en realidad se debe a problemas de pareja. Ante la duda, lo primero que debes hacer es preguntarte sobre el origen de la disminución del deseo: ¿está relacionado con tu pareja o es solo de tu lado? Si crees que el problema viene de la pareja, trata de entender la causa. ¿Estás en una fase de fuertes discusiones o falta de complicidad? En los casos más extremos, las relaciones tóxicas, especialmente aquellas que socavan la noción de confianza, son destructivas para la libido. Pero la disminución del deseo también puede derivar de una rutina sexual que se ha establecido progresivamente dentro de la pareja, como si los dos miembros de la pareja ya no pudieran sorprenderse.

Atrévete a enfrentar el problema dentro de la pareja

De todas las disfunciones sexuales, la libido baja es, con mucho, la más común y afecta aproximadamente a una de cada dos personas. Sin embargo, sigue existiendo un gran tabú, tanto dentro como fuera de la pareja. Rápidamente interpretado como una afrenta personal, a veces se necesita coraje y tacto para poder hablar con tu pareja al respecto. Pero hablar de ello sigue siendo el enfoque más efectivo y saludable para resolver el problema. Trate de discutirlo lo mejor que pueda con calma, para evaluar sus observaciones. ¿Algún consejo final? Prefiero frases positivas como: “Me gusta mucho, me gustaría probar esta práctica”, que críticas tras el amor como: “Hubiera preferido ver una serie”. Al abrir el diálogo de manera pacífica, las conversaciones sobre este tema nos permiten enfrentar el problema y encontrar soluciones juntos. La libido corre el riesgo de volver a empezar gracias a las discusiones: encontrarás lo que puede revivir esta energía vital, experimentando nuevas experiencias, hablando de tus fantasías… ¡O incluso cocinando juntos alimentos que aumentan la libido! Por último, no dudes en iniciar terapia de pareja, y más precisamente en contactar con un sexólogo.

Disminución de la libido: causas exógenas

Además, no olvides que hay muchas causas de disminución del deseo fuera de la pareja. Entre estas, las dificultades cotidianas como el estrés, el trabajo, la carga mental o un shock emocional reciente pueden tener fuertes efectos antilibidinales. Otros factores, como los tratamientos farmacológicos (especialmente psicotrópicos) o algunos anticonceptivos hormonales (especialmente las pastillas) también pueden provocar una disminución del deseo. Si crees que tu disminución de la libido se debe a alguno de estos factores, habla con un médico especialista.

Artículos relacionados